domingo, 2 de noviembre de 2008

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la arqueologia es un aciencia social, qiue estudia al pasado del hombre a traves de la sultura material, para luego entender el proceso social. si habalmos en el ámbito peruano es el estudio prehispánico
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ESTUDIO DE LA SOCIEDAD CHAVIN Y PERFIL DE PROYECTO DE ANÁLISIS LÍTICO

ESTUDIO DE LA ICONOGRAFÍA RELIGIOSA DE LA
“SOCIEDAD CHAVIN”

UNIVERSIDAD NACIONAL DE SAN CRISTÓBAL DE HUAMANGA
POR: ARMANDO GÓMEZ VALENCIA
ESTUDIANTE DE ARQUEOLOGIA SERIE 500




INTRODUCCIÓN

¿Por qué surge la religión?
El hombre desde su presencia en la tierra ha desarrollado un orden de las cosas propio, tratando de explicarse sobre su existencia como ser viviente, a los cuales lo llamó religión, tecnología, arte y otros componentes sociales que suscitaban en su entorno, los cuales han sido aplicados en la vida cotidiana. Como se sabe el hombre andino nos dejó testimonios desde periodos muy tempranos, como resultado de su existencia y su lucha con la naturaleza. Lo cual surgió interrogantes de las cosas extrañas que pasaba en su entorno en relación al globo terrestre, representada en los efectos de fenómenos naturales, lo cual no ha sido posible explicar por el hombre temprano como lo conocemos o sabemos ahora. Estos efectos naturales consistían en sonidos de relámpagos, terremotos, inundaciones y otros hechos naturales que daban temor al hombre, esto sería como una causa para entender de que algún ser poderoso existente enviaba su malestar en reacción a los actos cometidos por los hombres. Ante este hecho el hombre en su búsqueda de solución de estés problemas empieza crear dioses imaginándose con caracteres sobre naturales y en cosas terrenales representadas en faciales de animales, faciales diabólicas y antropomórficos, lo cual fue plasmado en diferentes materiales desde épocas muy tempranas, para el periodo lítico encontramos plasmados en los petroglifos, pinturas rupestres así pasando un proceso de desarrollo social hasta la creación de los templos como el de Sechin, Manos Cruzadas, Bandurria, Caral, y Chavín el cual será nuestro tema de trabajo. En periodos y sociedades muy complejas la presencia religiosa se institucionaliza dentro de la estructura social, administrativa y control de un determinado territorio por lo que aparece plasmado en diferentes manifestaciones culturales. Dentro de nuestro área y periodo de trabajo se encuentra muchas imágenes y formas en la iconografía, en la cual representan diversos seres de la naturaleza circundante, y su posible fuerza divina y sobrenatural, sus caracteres específicos o la imagen que la gente tenía de aquellos, creemos que estos hombres tenían la capacidad para hacer complejas abstracciones dándole una función anímicas, además tenían la capacidad de demostrar expresiones mágicos religiosos y complejas metáforas que hacen de las palabras, verdaderas imágenes orales u oraciones que va mas allá de real. Además dentro del avance de la religión , es evidente que el pensamiento andino fundamentó sus conceptos y accionar en respecto al medio ambiente al cual había que ordenar cíclicamente además ligado al culto de los ancestros ligados mayormente a sus familiares, esto nos indica además que el concepto antepasado fue muy rico y variado en explicar el origen de nuestras sociedades y su posterior formación de complejos centros oráculos de peregrinaje.
¿Qué datos se necesita para contestar la pregunta?
Dentro del trabajo a desarrollar tendremos como datos, las representaciones iconográficas plasmadas dentro de las lito esculturas, cerámicas, textiles y complementados en las estructuras murales con presencia de pintura, los cuales nos permitirá entender el desarrollo religiosa de la sociedad Chavín. Pero además será un aporte importante las sociedades coexistentes de esta sociedad en las expresiones mágicas religiosas que presentan. De esta manera observamos las imágenes Cupisnique y Chavines o cualesquiera de esta época, tiene iconografías con caracteres de un desarrollo muy avanzado ya sea en términos de signos específicos o como las ideas representadas. Por lo cual para ambas manifestaciones planteamos una pregunta. ¿De dónde y desde cuando vienen dándose ese proceso?. Eso nos muestra que el inicio de estas deidades o creencias surgieron[1][1] desde precerámico representadas en las textiles y cerámicas imágenes complejas correspondientes a las diferentes actividades desarrolladas en la costa en su mayoría, lo cual nos muestra la constante producción cultural e imaginario de este periodo.
CAPITULO I

1.1. CONCEPTOS BÁSICOS:
1.1.1. COSMOVISIÓN
La Cosmovisión Andina, considera que la naturaleza, el hombre y la Pachamama (Madre Tierra), son un todo que viven relacionados perpetuamente. Esa totalidad vista en la naturaleza, es para la Cultura Andina, un ser vivo. El hombre tiene un alma, una fuerza de vida, y también lo tienen todas las plantas, animales y montañas, etc., y siendo que el hombre es la naturaleza misma, no domina, ni pretende dominar. Convive y existe en la naturaleza, como un momento de ella. La revalorización de las culturas originarias y la reafirmación étnica, tal como se manifiestan actualmente entre los pueblos andinos, son una consecuencia de la toma de conciencia de miles de hombres y mujeres, que redescubrieron los tesoros que nos dejaron nuestros ancestros. Este proceso de revitalización cultural, tiene sus guías y sus líderes. (Blithz Lozada y Reichel Dolmatoff)

1.1.2. RELIGIÓN
Como sabemos desde su aparición y hasta nuestros días, la humanidad en su gran mayoría se ha inclinado por tener creencias religiosas y depositar su fe en un Ser Superior. La religión es unión entre hombre y Dios, que acompaña así la historia del hombre y marca su destino. Incluso la oposición a una creencia encierra cierta religiosidad sobre el valor del hombre por sí mismo. No obstante la enorme cantidad de creyentes, existe por circunstancias culturales y nacionales, una diversidad en religiones. Cada vez, incluso, surgen más divisiones o ramificaciones dentro de una misma religión. En la actualidad se gestan con mayor velocidad drásticos cambios en la moral, la economía, la política; mientras que la ciencia y la tecnología evolucionan meramente hacia satisfacciones materiales y encuentran obstáculos para los nuevos retos. El hombre en general busca reencontrar un camino más espiritual que le permita una vida más auténtica, armónica y feliz. En diferentes ámbitos del mundo y por distintas vías, muchos hombres vuelven la mirada a lo religioso y a su reencuentro con Dios. (Cristóbal Campana)
1.1.3. ICONOGRAFÍA:
A lo largo de la Historia, la imagen ha supuesto un cauce de expresión y comunicación de todos los pueblos andinos. Precisamente por ello constituye un lenguaje autónomo con sus propias normas y códigos de interpretación. Las imágenes pueden presentarse a través de diversas técnicas (pintura, escultura, grabado...) y en multitud de estilos. Todo depende de la sociedad que la engendre, del sistema de valores del momento y del artista que ejecute la obra. Así pues están dispuestas bajo un orden que es susceptible de ser estudiado y analizado para descifrar las claves de su representación. Además la representación de lo divino en la iconografía ha sido desde siempre un tema de gran importancia en la historia de la sociedad. ¿Es posible adorar a los dioses a través de imágenes que los representen? ¿o, próxima a la superstición, es la imagen misma la que se convierte en objeto de culto? Las diferencias de opinión respecto a esta cuestión se reflejan en la alternativa de nuestros estudios como arqueólogos y entender desde una perspectiva semiológica. (Lumbreras: 1989)

CAPÍTULO II
2.1. ESTUDIOS PREVIOS
2.1.1. FORMACIÓN DE LA SOCIEDAD CHAVÍN
Luego de largos milenios en que las culturas cazadoras que ingresaron a América por el istmo de Bering se desplazaron por Norte y Mesoamérica, fijaron sus asentamientos en los Andes Centrales, evolucionando desde sociedades cazadores y recolectores a sociedades de agricultores sedentarios que cultivaban calabazas, frijoles, pallares, maní, tubérculos y posteriormente el maíz, además de varias otras plantas comestibles o útiles. Viven ya en aldeas, fabrican cerámica, tejen telas y cestos, labran la piedra, entierran con ceremonial a sus muertos(Lumbreras: 1969). Han creado una organización tribal y una magia que aún inicio de la religión. Estos milenios son un antecedente muy importante para el inicio de la revolución teocrática y urbana(Chavin) y las consecuencias que produjeron. Hacia 2500 años antes de nuestra era, cuando menos en algunas áreas, existen poblaciones permanentes que el arqueólogo puede recrear, planteando hipótesis sobre el desarrollo sociopolítico, económico y religioso de estas comunidades que están en el centro de la civilización. A partir de ese momento empieza a dibujarse el área cultural que son los Andes Centrales y surgen los elementos básicos que le permitirán elevarse al rango de civilización(KAUFFMANN: 1968). Los hombres fueron complejizando su cultura, elevando su nivel de vida y acumulando conocimientos y nuevas formas de pensar, iniciadores de esa diferenciación regional que luego del esplendor de Chavín. Estas sociedades fundaron una sociedad compleja, pero para el cual un factor importante fue la estructura ecológica, el cual fue un valor estratégico para la ocupación y desarrollo de diversos grupos sociales y crear un imperio resplandor y dominador a otras áreas sociales(Lumbreras: 1969). Además Chavin fue un Síntesis del proceso formativo fue el florecimiento del horizonte temprano, aproximadamente hace miles de años atrás. Se trata del primer intento de integración cultural panandina, ya con dominó diversos pisos ecológicos, con la diversidad de recursos que cada uno ofrece y con los distintos modos de vida que posibilitan. La investigación arqueológica demuestra que Chavín dominó o irradió su influencia en una extensa región que incluyó sitios en la sierra, la costa y la amazonía, desde Ecuador hasta Bolivia. Chavín es un horizonte cultural cuyo centro principal es el sitio de Chavín de Huántar, a 3,200 m de altitud, en el área de cultivo del maíz y en una zona clave para controlar los intercambios costa y selva. La mayoría de autores sostiene que el dominio de Chavín en una extensa área se debió más al proselitismo religioso que a la conquista militar. Como quiera que fuese, ejerció gran influencia sobre un amplio territorio, generando una cultura de carácter unitario, sobre la cual, con el transcurrir del tiempo, se irían configurando diferencias regionales. El gran centro ceremonial de Chavín de Huántar fue residencia de una elite sacerdotal, transformada en clase dominante que tuvo a su servicio directo en el templo a los burócratas y a los artesanos especializados, captando el tributo productivo de los pueblos agrarios y pastoriles de su entorno, estructuración que se va a repetir en todos los sitios a los que irradió su influencia cultural. Como se sabe el Período Formativo esta estrechamente ligado al fenómeno Chavín, y en especial con el centro ceremonial de Chavín de Huántar. Actualmente este período se subdividido en tres etapas sucesivas. A la primera se le identifica fundamentalmente con la aparición y el empleo de la cerámica y la ampliación de los centros ceremoniales que habían sido edificados en la etapa superior del Período Arcaico. El Formativo Medio se caracteriza por la práctica de la agricultura intensiva y el empleo de sistemas hidráulicos; la caza, en cambio, empieza a perder importancia. Las reservas son más abundantes y más seguras y va apareciendo el caso de tener que utilizarlas para satisfacer necesidades esenciales de subsistencia.

2.1.2. CONTROL DE LA SOCIEDAD Y LA RELIGIÓN
El Formativo de los Andes Centrales, basado en un sistema teocrático, estuvo precedido por una serie de cambios tecnológicos; podemos asegurar que la organización de la sociedad sufrió cambios considerables. La figura dominante de este nuevo orden social, como ya señalamos, fue el especialista en materia religiosa, cuyo eje de autoridad era el centro ceremonial, el recinto sagrado, el centro del mundo, apartado de las labores cotidianas ordinarias y de la chozas de los cultivadores del campo. En el interior de estos recintos como Chavín, Garagay, Moxeque, Huaca de los Reyes, Pacopampa, Kuntur Huasi se encontraba el aparato especial que servía para concentrar, almacenar y distribuir entre los hombres comunes, la energía sobrenatural. Esta maquinaria estaba en manos de personajes extraordinarios, sacerdotes a la vez que gobernantes, cuya especial formación y conocimientos esotéricos les permitía acercarse a las divinidades y trasmitir sus deseos; es posible que consumasen alucinógenos para entrar en contacto con sus dioses. Estos especialistas lucían los símbolos de la divinidad: la máscara del jaguar y del águila arpía, y hablaban por boca de los dioses. Los sacerdotes no estaban sólo entregados a lo sobrenatural, sino que sentían verdadera pasión por el poder que ejercían sobre los demás hombres. En estos sacerdotes, la sociedad había creado un cuerpo de gentes que consagraban todo su tiempo a las cuestiones religiosas, pero quienes además eran especialistas en materia de organización, capaces de exigir a todos los hombres, trabajo, tributo y homenajes. A un régimen de esta índole, se le ha llamado teocrático y bajo su égida se confunden el poder gubernativo y la autoridad religiosa. De este modo, el orden social no era más que un reflejo del orden universal. Si los dioses se afanaban por mantener en la tierra a los hombres y si los hombres trabajaban para mantener a los dioses en el cielo, el equilibrio de la sociedad estaba convenientemente asegurado.
Los nuevos especialistas ejercían también funciones económicas, algunas de las cuales se relacionaban con sus actividades religiosas. Los sacerdotes no ejercían únicamente funciones de administradores y de organizadores del esfuerzo agrícola. En su calidad de servidores de los dioses, administraban los valiosos bienes ofrecidos a las divinidades.
Las investigaciones bibliográficas que realizamos nos demostraron que esos centros religiosos se transformaban en verdaderos almacenes sagrados, en los que se acumulaban los costosos productos oro, tejidos, cerámica, piedras preciosas, conchas y obsidiana al servicio de lo sobrenatural. Los sacerdotes no se contentaban con almacenar ofrendas y mercancías y patrocinar el comercio. El centro de este nuevo orden de cosas fue siempre el recinto del templo.
Los dirigentes religiosos también imprimieron su nuevo poder y el de sus dioses, en las obras de arte, muchas veces llamadas "clásicas". Significa que sociedad Chavin se caracterizó no solamente por el alto desarrollo de la sociedad, sino también de las formas de expresión de esta misma sociedad. Este término corresponde, en última instancia, a un apogeo, a una perfección de las formas artísticas. Sin duda el período teocrático es realmente un período de apogeo y de realización. El estilo artístico Chavín es esencialmente difícil de apreciar. El arte religioso del Formativo andino está caracterizado, al menos, por dos grandes estilos artísticos: el de la sierra con la predominancia de Chavín y el costeño donde destaca Cupisnique y las esculturas en barro de Moxeque, Puncurí y Huaca de los Reyes. El estilo de la sierra alcanza su plena realización en las zonas altas con el predominio de la escultura lítica y un elaborado y refinado estilo de cerámica. El estilo costeño se halla representado en los centros ceremoniales de los valles costeños del centro y del norte y la esmerada producción de la alfarería de Cupisnique. El gran contraste entre estos dos estilos se revela claramente en los monumentos públicos. Las pirámides teocráticas de la Sierra (Chavín, Pacopampa, Huacaloma, Cunturhuasi, Kotosh, Chavín, Chupacoto, Tumshucaico) son edificaciones, como ya se anotó, en piedra. En tanto que las pirámides de la costa (Garagay, Moxeque, Sechín Alto, Cerro Blanco, Puncurí, Huaca de los Reyes, entre otros) son construcciones donde se emplearon adobes revestidos con estuco y pintura pero finalmente ambos estilos comparten diseños arquitectónicos análogos:

CAPITULO III

3.1.ANÁLISIS DE LOS REPRESENTACIONES ICONOGRÁFICOS
Como vemos el central de nuestro análisis, es que como estas sociedades expresaban sus pensamientos religiosos a través de la iconografía, en la cual nos muestra, que estas sociedades como Chavin tenían un pensamiento de lo sobrenatural en relación a los fenómenos que ocurrían dentro de su vivencia. Este hecho consagro en la construcción de una sociedad organizada religiosa, además pensamos que las muestras iconográficas que tenemos expresan las posibles expresiones del culto como podemos presencias tanto en la arquitectura decorados con relieves planos que representan animales estilizados, fundamentalmente cóndores, serpientes y jaguares y seres humanos felinizados, destacando las llamadas cabezas clavas destinadas a sostener hombres sacrificados. Se trataba de deidades destinadas a imponer terror a los pueblos sobre los que se impuso su culto. Los mismos motivos se muestran en su cerámica, que se utilizó a veces como ofrenda para los templos. Además lo cual nos muestra que Chavín fue un centro de culto y sus templos tenían carácter sagrado. Al parecer, el sitio fue cuidadosamente elegido, bajo estrictos criterios mágico-religiosos debido a que existen valles cercanos más productivos, aún considerando el aprovechamiento de sus laderas de secano cultivadas mediante terrazas. Los habitantes de Chavín fueron unos pocos sacerdotes y sus auxiliares de servicio, mientras que la mayor parte de sus usuarios eran una suerte de peregrinos que llegaban al lugar en busca de "oráculos", portando ofrendas de diverso tipo, pudiendo permanecer por largos períodos. Para lo cual presentamos algunas iconografías religiosas de esta organización, lo cuales son expresiones máximas de este tema de análisis.
Ø IMPORTANTE
Dentro de estas imágenes representan las expresiones religiosas mediante las deidades que podrían tener un significado muy grande dentro de esta sociedad en su lenguaje cotidiano y al entender al mundo. Después de la previa descripción de cada uno de las representaciones iconográficas al final se dará una interpretación general a modo de análisis.

3.1.1. LANZON DE MONOLITO




Presenta a un personaje antropomorfo de pie, con rasgos felinos, con el brazo izquierdo pegado al costado y el derecho levantado. Sus manos están representadas como garras, al igual que sus pies. El rostro felinoide muestra la nariz gruesa, labios abultados con los extremos vueltos hacia arriba. De los extremos del labio superior emergen sendos colmillos conformando la boca atigrada característica de la iconografía Chavin, tanto en monolitos como en cerámica y artesanía en otros materiales. Cejas y cabello están convertidos en serpientes, y el ojo, redondo y sin párpados, presenta la pupila mirando hacia arriba. Su cuerpo, humano, viste una camiseta y un faldellin provisto de un cinturón de serpientes. Como adornos lleva un collar trenzado y un par de orejeras. La típica cara felinoide, vista de perfil, se repite diez veces en el tocado y siete en el faldellín

3.1.2. OBELISCO DE TELLO

Representa a una divinidad compleja: la unión de dos caimanes. En toda su superficie se representan multitud de otros elementos: hombres, aves, serpientes, felinos, plantas (calabaza, ají, maní, yuca), etc. El monstruo divino parece alimentarse de todos ellos.
Es difícil perfilar el detalle en este compleja de figuras , pero aparecen aspectos que son comunes a las representaciones escultóricas Chavin. La divinidad presenta labios gruesos, con afilados dientes que sobresalen de su boca. Otras bestias presentes se muestran también con ese patrón, el de “boca atigrada”, tan característica de Chavin.
Las extremidades de la divinidad están provistas de manos garra, con largas uñas

3.1.3. ESTELA DE RAIMONDI
La Estela Raimondi es un monolito que corresponde a esta sociedad Chavin. Representa a una divinidad antropomorfa felinizada, de pie, con sus brazos abiertos sosteniendo en cada uno de ellos una vara o báculo. Esta representación aparecerá en otras culturas andinas precolombinas posterior a Chavin: la clásica “divinidad de los dos báculos”.
La figura divina presenta cabeza rectangular, cabellos transformados en serpientes, “boca atigrada” y ojos con pupila excéntrica, mirando hacia arriba, y lleva un tocado complejo, pectoral y faldellín con cinturón de serpientes, que recuerda a la bestia de El Lanzón, en el Templo Viejo de Chavin de Huantar. Aparecen también animales con sentido decorativo.
3.1.4. CABEZAS CLAVAS
Las Cabezas Clavas de Chavín son de distintos tamaños. Presentan en todos los casos una estructura alargada en su parte posterior a través de la que son insertadas como un clavo en los muros destinados a su exposición. En unos casos presentan rasgos antropomorfos, y en otros felínicos, al estilo de la figura de el Lanzón: “boca atigrada” con colmillos; agnática, es decir sin mandíbula; y cabello capilar convertido en serpientes.

3.1.5. INTERPRETACIÓN
Los cuales muestran una representación de deidades y religiosas, en las diferentes faciales, lo importante fundamental es demostrar la presencia de una deidad antropomorfa en función social dentro de estas esculturas. Esto fue un unificador mediante la práctica de cultos en los templos ubicados en los centros de peregrinaje. Por ello entendemos que estas iconografías o símbolos que aparecen dentro de estas presuponen como la satisfacción social en relación del mundo del mas allá. Los Chavinenses entendiendo de una forma respetada creían que la fuerza del mito religioso está presente hasta en la misma naturaleza. La intensidad perceptible en toda sus creaciones no es ciertamente casual ni tan sólo producto de talento individual. Cada obra, des­de la Gran Imagen hasta el más simple utensilio encierra una misteriosa energía, que ningún individuo podría pretender como suya, personal. Pero, esta peculiaridad, común a todas las altas culturas, puesto que ellas son producto de un pueblo y no de una élite, aparece enig­mática en Chavín, gobernada, co­mo se supone, por una casta sa­cerdotal altamente represiva. El len­guaje de los artistas se ha desti­lado hasta lo inverosímil, de ma­nera que los signos exteriores de lo sagrado aparecen reducidos a lo esencial, a una mera caligrafía, cuando no a pocas líneas curvas, puntos, círculos, triángulos, que fueron garras, lomos, ojos, man­chas, plumas, colmillos. Abstrac­ción que es un proceso de sínte­sis a partir de una imagen divi­nizada (Kauffmann: 1969), felino, o concretamente ja­guar (Lumbreras: 1989), y por lo tanto ima­gen cifrada desde el comienzo, al­fabeto cuyo conocimiento supone el ingreso, siempre temible. Pero la vida social y religiosa de esas sociedades Chavinenses , en la que a partir de una divinidad antropozoomorfa, toda la vida comunitaria se convierte en una constante interacción de elementos pertenecientes al reino animal, vegetal, mineral y sideral. Pero en estas iconografías presentan unas comunicación metafóricas del universo, en el que todo, desde el guijarro hasta el templo, desde la humilde serpiente hasta las alas abiertas del dios, o desde la boca del hombre hasta el colmillo sagrado, todo ha sido escrupulosamente consignado, sin más concesiones a uno u otro de esos elementos que los impuestos por la tradición y culto. Así, la divina ambigüedad pasaba de la esfera religiosa a la vida cotidiana y de ésta ascendía nuevamente, enriquecida, al panteón chaviniano. En este sentido, la religión Chavín posee, sin lugar a dudas, uno de los más apasionantes y más completos vo­cabularios jamás inven­tados por el hombre. Lástima que, hasta la fecha, nadie haya reali­zado un serio trabajo de descodi­ficación de sus elementos constitutivos. En este breve trabajo hemos tratado de explicar el posible sentido de la existencia de estas iconografías como expresión religiosa dentro de nuestro entender.

4. CONCLUSIONES
Ø La expresión religiosa dentro de este periodo fue muy importante para el control y dominio de las áreas congregadas, lo cual fue un medio importante para el dominio de de los pueblos dentro del Formativo Andino bajo la dirección de Chavin de Huantar.
Ø Las representaciones iconográficas que se muestran son expresiones netamente religiosas que expresan unas deidades como símbolos de cultos, los cuales se encontraban dentro de los centros de peregrinajes.
Ø Las representaciones iconográficas religiosas vienen mostrándose desde épocas muy tempranas, con iconografías diferentes, pero los cuales posiblemente cumplieron un rol importante para que en el formativo andino llegara a una máxima expresión religiosa con un dominio social.


BIBLIOGRAFÍA

DELGADO CAMPANA, Cristóbal
1995 “Una Deidad Antropomorfa en el Formativo Andino” Editorial A&BSA-Lima Perú – La Victoria. SIGLO XX. (cod. 017049/C22/1995) - UNSCH

DELGADO CAMPANA y RICARDO MORALES.l
1997 “Historia de una deidad Muchica” Editorial A&BSA-Lima Perú – La Victoria. SIGLO XX. Cod. 930.18516/C22/1997 - UNSCH.

LUMBRERAS, Luís.1989. Chavín de Huántar en el nacimiento de la civilización andina.
Lima: INDEA. SIGLO XX

KAUFFMANN DOIG, Federico.
1969 “Arqueología Peruana” Impreso en Iberia S.A. Lima Perú. SIGLO
XX.. Pág. 156 – 260. CAPITULO II “Chavin como expresión Clásica del formativo.

MAXIMO GRILLO, Annunziata
2002 “Filosofía Andina, Pre-hispánica- Lima – Perú, Juan Gutemburg.
Editorial Impreso., SIGLO XXI – Bib. UNSCH.
[2][1] El periodo que nos referimos, son las sociedades pre-chavinenses ó Arcaico tardío con algodón, donde surgen tejidos con representaciones de imágenes mágicos religiosos.



UNIVERSIDAD NACIONAL DE SAN CRISTÓBAL DE HUAMANGA

FACULTAD DE CIENCIAS SOCIALES

ESCUELA DE FORMACIÓN PROFESIONAL DE ARQUEOLOGÍA E HISTORIA

PERFIL DEL
PROYECTO DE INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICO DE ANÁLISIS LÍTICO DE PIKIMACHAY

POR : GÓMEZ VALENCIA ARMANDO


AYACUCHO - 2008


ESQUEMA DE INVESTIGACIÓN

TEMA: PROYECTO DE INVESTIGACIÓN ARQUEOLÓGICO DE ANÁLISIS LÍTICO DE PIKIMACHAY

UBICACIÓN:

UBICACCION COROLOGICA DEL SITIO EN ESTUDIO:
Región : Ayacucho
Provincia : Huanta
Distrito : Pacaycasa
Material Procedente : Pikimachay

CRONOLOGIA A LA QUE PERTENECE:
Periodo Lítico: 16 000 -12 000 AC. Aprox. según Lumbreras y por otros como Mac Neish 20,000 años a. c.

OBJETIVOS

OBJETIVOS GENERALES:

1. El objetivo central de este trabajo, es entender la funcionalidad y el proceso de desarrollo social a través de los materiales líticos, en función a la industria elaborada.
2. Estudiar desde una perspectiva diacrónica, a la comprensión de las variaciones de la tecnoldías líticas de las sociedades tempranas con un componente caza y la recolección en su subsistencia.

OBJETIVOS ESPECÍFICOS:

1. Identificar el nivel de desarrollo tecnológico del material lítico y sus posibles funciones.

2. Entender la actividad económica social a través de los objetos líticos

3. Establecer la evolución tecnológica de acuerdo al registro estratigráfico en la que se halló los objetos líticos.



MARCO TEORICO

Los artefactos líticos son probablemente uno de los vestigios arqueológicos sobre los cuales menos se ha trabajado y discutido los arqueólogos en nuestra región, por ello nos proponemos realizar este trabajo para mediante el cual entender el modo de vida social y el sentido de la existencia de los materiales líticos. Esto se debe a su importancia en la historia evolutiva de las poblaciones humanas y su perdurabilidad en relación a otros materiales arqueológicos. Por ello para el análisis de este tipo de evidencia se han desarrollado multitud de metodologías y planteamientos explicativos que se enfocan tanto en sus dimensiones morfológicas como funcionales. Además la importancia del estudio de los restos líticos asociados a las ocupaciones humanas pretéritas se fundamenta en la idea de obtener información que resulta relevante para comprender aspectos del modo de vida social y económica de esa época teórica y metodológicamente, acerca de los cuales se puede, establecer comparaciones, realizar análisis y finalmente interpretar. Para ello actualmente se cuenta con metodología y planteamientos de investigación anteriormente realizados como (Lavallé, Bate, Pozi Escot, Shemenov, y otros investigadores de diferentes periodos. Además para el trabajo que pensamos realizar se ha identificado instrumentos líticos de diferentes tipos y funciones.


ANTECEDENTES HISTÓRICOS
La población de América no es autóctona. Hace muchos miles de años llegaron las primeras oleadas de pueblos asiáticos; ellos entraron al continente americano por el astrecho de Bering y luego penetraron hacia el sur, hasta que cubrieron toda la extensión entre Alaska y Patagonia, fue aproximadamente hace 70.000 años cuando comenzó la glaciación de Wisconsin, último gran enfriamiento del Cuaternario. (Cardich: 1998)
Las primeras bandas de cazadores y recolectores nómades llegaron a los Andes Centrales hace unos 15 mil años a.C. Esto quiere decir que encontraron nuestro actual territorio en condiciones geográficas muy diferentes, eran los últimos tiempos de un periodo llamado Pleistoceno. Las evidencias más antiguas de presencia humana pertenecen al Pleistoceno Tardío, cuando grandes áreas andinas estaban cubiertas por el hielo y el litoral peruano era más ancho que en la actualidad (Cardich: 1998). Los Andes Centrales estaban habitados por grandes mamíferos adaptados a los fríos climas de la era del hielo. Entre los animales más destacados de la megafauna pleistocénica estaban los mastodontes, megaterios, gliptodontes, smilodontes y paleollamas.
Los arqueólogos han encontrado evidencias que demuestran que los primeros ancestros convivieron con esta megafauna y que además eran cazadores ávidos de la carne de estos animales (Carré: 1982). Pero el desarrollo de los primeros habitantes en esta región esta testimoniado por los hallazgos de diferentes tipos de puntas de proyectil, y otros objetos líticos ubicados en los sitios, como (Pikimachay, Jaywamachay, etc.) Lugares importantes en el estudio de estos grupos pleistocénicos son Paccaicasa - Pikimachay (Ayacucho).
En el periodo Lítico los cazadores indiferenciados y nómades fueron desarrollando sus estrategias de cacería hasta convertirse en cazadores especializados y selectivos que construían campamentos estaciónales como los sitios estudiados de (Rick: 1983). En esta etapa surgen importantes talleres donde se fabricaban armas y utensilios para diferentes actividades. La propagación de los cérvidos (tarukas) y los camélidos andinos (llamas, vicuñas y guanacos) incentivó la cacería de estos veloces animales. Para esto se requería el uso de nuevas estrategias e instrumentos líticos de mejor calidad (puntas de lanza) que se fabricaban en talleres especiales; era la época de los cazadores especializados. (Lumbreras 1983). Las estrategias de supervivencia variaban según las condiciones geográficas de los diversos pisos ecológicos de nuestro país. Por ejemplo, en las mesetas alto andinas existían campamentos estaciónales en áreas y temporadas de abundantes camélidos (Rick 1983). Además sostiene incluso que en las zonas altas andinas de Junín existieron, en pleno Periodo Lítico, cazadores sedentarios que vivían en campamentos permanentes por muchos años, aprovechando la abundancia de camélidos de la zona. Mientras tanto, en el litoral era muy importante la recolección de mariscos junto a la caza de venados. Diversos grupos humanos aprovechaban los abundantes recursos de las lomas en las temporadas de fuerte nubosidad costeña. Además propone que estos mismos grupos ascendían a los pisos ecológicos serranos para cazar y recolectar en los periodos de lluvia a los cuales denomina como un modelo de “Transhumancia Estacional”.
Luís Guillermo Lumbreras explica las características socio-económicas de la “comunidad primitiva” en el Perú: “Según el conocimiento que tenemos de las sociedades de cazadores y recolectores, el sistema de relaciones económicas y sociales era de tipo recíproco directo, que quiere decir que se basaba en la ayuda mutua directa entre cada una de los miembros de la banda, sin depender de intermediarios. No existía la propiedad individual de los bienes de subsistencia, dado que las presas de caza requerían casi siempre la participación de varios para lograrse y porque la adquisición de alimentos estaba de alguna manera abierta a todos (Lumbreras: 1983). Los instrumentos de caza eran susceptibles de ser producidos por todos los miembros, dado que no requerían de ninguna especialidad. Dicho de otro modo, todos los que vivían juntos eran gentes de la misma clase, aun cuando tuvieron distintas actividades según sea su edad y sexo. La vivienda era colectiva, común; normalmente era un lugar abrigado, protegido de los rigores del clima, cercano a las zonas de caza o recolecta de plantas, cuevas, abrigos rocosos. (Lumbreras: 1983)
Los primeros grupos humanos que llegaron a nuestros territorios regionales como Ayacucho buscaron zonas propicias y acogedoras, cuando no las encontraban enfrentaban un difícil proceso de adaptación a las condiciones geográficas y climáticas de los diversos pisos altitudinales. En este proceso estos primeros hombres y mujeres fueron comprendiendo las características peculiares de estas tierras serranas. Varios miles de años de aprendizaje permitieron que años mas tarde emprendan una nueva etapa de domesticación y transformación de la naturaleza. (Lumbreras: 1983)
Sobre la organización social en el Periodo Lítico, se acepta generalmente que la unidad básica era la banda. Esta era conformada por un grupo variable de personas que convivía en una cueva o en un campamento. El promedio de personas por banda sería de 30 individuos; donde predominaban las mujeres y los niños. Es lógico suponer que en zonas o temporadas difíciles para la supervivencia el grupo desminuía en número, pero en tiempos de paz y abundancia, el mismo se incrementaba fuertemente.
Se considera que en las bandas paleolíticas era común que los varones se dedicaran a la caza, mientras las mujeres aportaban con la recolección de vegetales silvestres. A esto se denomina “división sexual del trabajo”. Los hombres jóvenes y fuertes se encargaban de cazar a las bestias, para conseguir carne, lana y huesos. La gran tarea de cuidar directamente de los bebes y niños estuvo en manos de las mujeres, quienes muchas veces salían a buscar los frutos acompañados de los menores.
Ambas actividades caza y recolección- eran fundamentales para la supervivencia de la banda y lo más probable es que la llamada división sexual del trabajo no fue excluyente: hombres y mujeres participaban de las diferentes faenas según las condiciones geográficas y necesidades del grupo. Los bienes obtenidos eran distribuidos de acuerdo a las necesidades inmediatas del colectivo. Quien dirigía a una banda era el hombre más fuerte y experimentado, el mismo que gozaría de algunos privilegios ligados a su responsabilidad en el grupo. Además pensamos que las bandas eran endogámicas; es decir, que la reproducción se daba solamente entre los integrantes de una; sin embargo, esto sólo debió cumplirse en los grupos menores, típicamente nómades y más remotos. Además el periodo Lítico es llamado también Pre-Agrícola, pues sus grupos humanos representantes tenían una economía parasitaria o depredadora, desconocían las técnicas de producción agropecuaria, sus fuentes de alimentación provenían de la cacería, la recolección y la pesca.
La ocupación de los primeros seres humanos en Ayacucho fueron unas cuevas ubicadas por el reputado arqueólogo norteamericano Richard Mac Neish en 1969. La antigüedad de los restos fue calculada en 20,000 años. El mencionado investigador precisó dos lugares principales, a los cuales denominó ”cueva de Pikimachay” (Cueva De La Pulga) y Qaywamchay (Cueva De La Pimienta). Ambas cuevas están ubicadas en el distrito de Pacaycasa, provincia de Huamanga (Carré: 1992). Las excavaciones efectuadas sacaron a relucir instrumento líticos; huesillos de animales; semillas de una variedad de plantas entonces silvestres: maíz, calabaza, ají, achiote; restos fósiles de animales, como roedores, tigre diente de sable y otros. Estos hallazgos permitieron inferir que los primeros habitantes de la región fueron grupos humanos nómades del periodo de cazadores y recolectores. Se trata de los vestigios más antiguos del Perú. Cabe destacar que no se encontró ningún resto humano propiamente dicho, sino instrumentos muy primitivos y restos de alimentos (Lumbreras; 1983)
A esta época los arqueólogos llaman el “período lítico andino”. La etapa lítica es muy larga porque comprende unos 17,000 a 18,000 años, ya que termina con el descubrimiento de la agricultura y el establecimiento de la primera sociedad aldeana, con el proceso de sedentarización, el cual ocurrió unos 3,000 años AC (Rick 1983). En ese largo período los instrumentos líticos se fueron perfeccionando. Inicialmente, los instrumentos eran muy simples, básicamente láminas de piedra alargada que servían para cortar. Luego, se fabricaron cuchillos, punzones, puntas y otros artefactos que mostraban el progresivo dominio de la técnica. Al finalizar esta larga época inicial, las sociedades elaboraban puntas de piedra bastante bien hechas, con las cuales se facilitaban la recolección de raíces, y también producían finos cuchillos bifaciales (Cardich: 1998), para cortar y ayudarse en la caza (Rick 1983).
Los seres humanos del periodo lítico dependían de la caza y recolección para su supervivencia. Su economía dependía de aquello que la naturaleza les ofrecía. No estaban aún en condiciones de participar en su producción. Además, consumían los alimentos en forma también natural, sin alterarlos mayormente. Recién al final de esta larga época se empieza a cocinar, con un procedimiento de aquellos días que consistía en introducir piedras calientes dentro de grandes calabazas, preparando las primeras sopas que se tomaron en los Andes (Lumbreras: 1983).
A lo largo de este tiempo, estaban terminando las glaciaciones y el clima se estaba estabilizando. Las glaciaciones avanzaban y retrocedían, en los períodos intermedios había fuerte humedad y mayor calor, lo que conducía a la formación de grandes bosques (Carré: 1992). Estos ciclos de avance y retroceso de hielos terminaron unos 10,000 AC cuando culminó un período denominado pleistoceno (Cardich: 1998).
La fauna de aquellos días se halla parcialmente extinguida, porque incluía mastodontes, animales parecidos a los actuales elefantes, osos perezosos de hasta seis metros de altura, armadillos gigantes y paleo llamas (lamas lamas) de gran alzada (Carré: 1992). Esta fauna empezó a desaparecer cuando el clima cambió y empezó a parecerse al que tenemos hasta nuestros días, crecientemente seco y árido.
Las cuevas del período lítico atestiguan la larga presencia de los seres humanos en la región de Ayacucho. En alguna de ellas, además de otras evidencias se han hallado pinturas rupestres, como por ejemplo en la ladera norte del cerro Alcowillka, situado en Huancavelica, en una cueva denominada Rosasmachay, donde se hallan representaciones de animales. Asimismo, se hallan también animales pintados en la cueva de Uchuypikimachay, a escaso medio kilómetro de la famosa Pikimachay, descubierta por Mac Neish. (Valdez: 2008)
Otras cuevas con pinturas rupestres se hallan en la provincia de Acobamba, región Huancavelica, vecina al Ayacucho contemporáneo. Estas cuevas son llamadas Alalacc Machay y ha sido visitado últimamente por el arqueólogo Julio Valdez. La primera cueva tiene 10 x 15 x 5 metros y a uno de sus lados presenta pinturas de camélidos, alguno con el cuello alargado y el cuerpo redondeado (Valdez: 2008). Una combinación de estilos que luce muy moderna, asemejando a un Botero combinado con Modigliani. En la segunda cueva, los camélidos están pintados de rojo ocre, mientras que en una tercera, se aprecia una banda de camélidos corriendo unos detrás de los otros.( Valdez: 2008) Es muy posible que los cazadores de camélidos se hallan abrigado en estas cuevas y plasmado sus vivencias espirituales. Luís Guillermo Lumbreras dice que en esta época encontrar una buena cueva era un asunto esencial y que la banda en posesión de una de ellas debía cuidarla con mucho celo de cualquier advenedizo. Así, estas cuevas habrían sido concebidas como santuarios y los cazadores pintaron en sus paredes mensajes espirituales, ritos de magia que las generaciones siguientes se encargaron de preservar. Estas pinturas invocarían a los espíritus de la caza, pero eran a la vez una especie de sello de la banda, la marca de pertenencia de la horda primitiva (Lumbreras: 1983).
En la tradición serrana la industria lítica se compuso principalmente de puntas de proyectil con especiales características para la caza de grandes mamíferos: puntas con forma de hoja, triangulares o con espinas laterales (Carré: 1992). Por su tamaño y forma estas puntas debieron utilizarse en las lanzas o como dardos para la caza de tarucas y camélidos, principalmente guanacos. En la confección de utensilios domésticos los raspadores tuvieron un papel fundamental en la trata de pieles.
Fueron de uso común los chancadores o machacadores que sirvieron para romper huesos y extraer la médula ósea, ya sea para consumo o para la elaboración de algún rito ofrendatorio. La ausencia de raspadores indica que la caza de animales como camélidos o cérvidos fue poco practicada.
En lo que se refiere a la vivienda, existe igualmente diferentes formas de adaptarse a la geografía y al clima de la costa y la sierra. La sierra posee abrigos rocosos y cuevas que fueron el principal refugio para los pobladores serranos (Jhon Rick: 1983). A través de dibujos y pinturas en estas cuevas los hombres dejaron huellas de su vida y organización social.
Se ha hallado casi 200 utensilios primitivos en la cueva de Pikimachay. La mayor parte son raspadores y cuchillas de piedra. Unos cuantos son de hueso. Según el arqueólogo Richard Mac Neish, constituyen las herramientas más antiguas hechas por el hombre andino (VALDEZ: 2008).
Sobresalen dos puntas de proyectil, probablemente de las primeras flechas o lanzas que se fabricaron en el Ande para cazar animales. Todas las evidencias permiten concluir que la conducta de estos primitivos grupos andinos fue coherente con el mandato vital de subsistencia y supervivencia de la especie.
Los antiguos recolectores y cazadores pudieron haberse conducido inadecuada y erróneamente, de manera tal que atentaran contra su vida y la de la especie. No obstante, por el contrario, enfrentaron con éxito el reto de la subsistencia, se protegieron adecuadamente y, a través de la procreación, fueron aumentando en número y poblando el espacio andino.( Carré: 1992) Así garantizaron la permanencia de la especie humana en este rincón territorio ayacuchano. Ello es particularmente importante destacar si se recuerda que, a fines del Pleistoceno, la tierra experimentó bruscos cambios climáticos, a consecuencia de los que se extinguieron muchas especies. Extensos bosques quedaron convertidos en desiertos. Los megaterios, mastodontes, esmilodones o tigres de dientes de sable, perezosos gigantes, gliptodontes, o los pequeños y primitivos caballos,(Lumbreras: 1983) fueron incapaces de superar los cambios que se operaron sobre la superficie de la Tierra e inexorablemente se extinguieron. Los grupos humanos andinos, en cambio, como otros en el resto del planeta, en defensa de sus propios intereses, lograron sobrevivir a costa de adaptarse a las nuevas circunstancias (Carré: 1992). Entre muchas decisiones, aceptaron modificar algunos de sus hábitos de consumo, sustituyendo la carne de las especies que se extinguieron por la de aquellas que, como el guanaco, pasaron a poblar la superficie de los Andes. Actuar, voluntaria y concientemente, en su propio beneficio, eludiendo todo aquello que lo afecta, es sello distintivo de la vida humana. Protegiéndose del clima y de la intemperie, buscando agua dulce y alimento, adaptándose a los cambios por violentos que fuesen, y huyendo de la agresión de la naturaleza y de las grandes fieras, fueron, allá en el Pleistoceno, las conductas racionales que adoptó el grupo en defensa del más caro de sus intereses: la supervivencia. Así lo hicieron todos los grupos primitivos de recolectores y cazadores que habitaron de esta parte del planeta.

HIPÓTESIS
Ø A partir de los materiales obtenidos en Pikimachay como raspadores, cuchillos, y puntas de proyectil, pensamos que estos instrumentos sean los objetos utilizados, teniendo como función de armas, herramientas y utensilios de caza y recolección como parte de las necesidades durante sus actividades cotidianos.

VARIABLES
V. INDEPENDIENTES
Ø LOS PRIMEROS CAZADORES
Ø LOS PRIMEROS RECOLECTORES
Ø CANTERAS DE MATERIA PRIMA (OBSIDIANA, BASALTO, ANDESITA, ETC.)
Ø INDUSTRIA LÍTICA
Ø OBJETOS LÍTICAS

V. DEPENDIENTES
Ø CUEVAS COMO VIVIENDAS
Ø ACTIVIDAD ECONÓMICO
Ø ACTIVIDAD SOCIAL

V. INTERVENIENTES
Ø FLORA
Ø FAUNA
Ø RELIEVE TOPOGRÁFICO
Ø HIDROGRAFÍA
Ø CLIMA

METODOLOGÍA
Se empleará el método tecnológico, morfológico y funcional teniendo en cuenta los trabajos previos como de (Lavallé 1979, Bate: 1969, Pozzi Escot: 1987, y los Informes de Grado que se desarrollaron) los cuales nos permitirá realizar, un trabajo sistemático y entender el análisis de dichos objetos, para lo cual mencionamos los siguientes pasos.
1) Procedencia de la materia prima: A través de estudios de las canteras es posible definir de dónde procede la roca o mineral sobre la cual fue elaborado determinado instrumento. En particular para algunas materiales como la obsidiana se han establecido redes interregionales de traslado o posible intercambio de sitios muy lejanos, para ello el proyecto nos permitirá entender el origen de estas.
2) Tipología: El análisis tipológico de material lítico tiene una larga tradición en la arqueología (BATE: 1971) y se basa en la materia prima en que fueron elaborados, las técnicas de trabajo, la función y la forma La distribución de los objetos destinados a usos distintos, como áreas de actividad relativas al uso; sin embargo, por los materiales líticos, también se identificaran áreas de manufactura de los artefactos existentes como: cuchillos, puntas de proyectil, raspadores, raederas, perforadores, navajillas, etcétera.
3) Huellas de uso: Uno de los aportes más significativos al análisis de la función de una herramienta es el estudio de las huellas que sobre ésta dejaron una determinada actividad en el sitio en estudio. Actualmente notamos como una técnica que se esta desarrollando una rama de la arqueología experimental dedicada a reproducir las herramientas líticas y a usarlas en actividades específicas, para así evaluar las huellas que dejan sobre su superficie, y compararlas con los ejemplares arqueológicos, nos proyectamos realizar este tipo de experimento para entender la funcionalidad de cada artefacto.
4) Industria lítica: Finalmente se ha optado trabajar por el tipo de industria lítica a la que pertenece, para lo cual nos estamos proponiendo los siguientes componentes de los instrumentos líticos: La industria lítica de piedra tallada y la industria de piedra pulida.

TÉCNICA
La técnica consistirá en la aplicación de fichas de registro para las distintas clases, de acuerdo a una clasificación morfotecnológica y funcional (derivados y desechos: instrumentos, puntas, sin uso, modificados y núcleos). Además se empleará el registro fotográfico de los materiales más resaltantes, luego se realizará un dibujo de cada material seleccionada en materiales adecuados que tengan una función especial, con sus respectivas dimensiones. Además de estas técnicas se utilizaran los instrumentos adecuados como: Lupa binocular, que es un instrumento que nos va ha permitir para documentar la presencia de los filos antes de la utilización, ver la modificación macroscópica luego de las experiencias y daños causados en las piezas arqueológicas, luego se utilizará microscopio metalográfico, este microscopio es tradicionalmente elegido por los analistas líticos porque permite ver micropulidos, considerados como los únicos microrastros diagnósticos de uso.

RECURSOS: HUMANOS, MATERIALES Y PRESUPUESTO
Personal:
Investigador Responsable:
· El Director

Personal Auxiliar:
· 03 Asistentes de laboratorio (Bachilleres en Arqueología).
· 05 Auxiliares de laboratorio (estudiantes de arqueología de los últimos años)
· Un digitador.

Local donde se realizará la investigación
· Laboratorio de Arqueología
· Otros otro espacio Alquilado
Remuneraciones:

Del empleado Eventual
Tiempo
Cantidad
Sub. Total S/.
Director
mes
01
2,500.00
Asistentes de laboratorio
mes
03
4, 500.00
Auxiliares de laboratorio
mes
05
2,800.00
Digitador
mes
01
800.00
T O T A L


10,600.00

MATERIALES DE ESCRITORIO
Requerimiento
Unidad
Cantidad
Precio Unitario
sub.-total
Papel Bond A4 de 80gr.
Millar
03
26.00
78.00
Portamira 0.5 mm.
Unid.
02
03.00
06.00
Lapiceros azul y negro
Unid.
06
01.00
06.00
Cuaderno de 100 fojas
Unid.
02
01.50
03.00
Borradores
Unid.
02
00.50
01.00
Escalímetro
Unid.
02
18.00
36.00
Compás-Artesco
Unid
01
40.00
40.00
Tableros
Unid
05
04.00
08.00
Cinta Masking
Unid
03
03.00
09.00
Fólder Manila A4
Unid.
10
00.50
05.00
Papel kanson
Unid
100
00,03
30.00
Libreta de apunte
Unid.
02
03.00
06.00
Escala métrica
Unid.
05
00,50
02,50
Regla
Unid.
05
00,50
02, 50
Vidrio 20cm x 20cm
Unid.
05
01.00
05,00
Plumón indeleble
Unid.
05
02.50
12.20

MATERIAL DE IMPRESIÓN:

Papel Bond de 80 gr.
Millar
03
26.00
78.00






MATERIAL FOTOGRÁFICO

Cámara digital-Panasonic
Unid.
01
500.00
200.00
Memoria 50-512
Unid.
01
130.00
130.00







INSTRUMENTOS DE LABORATORIO

Lupa binocular
Unid.
01
50.00
100,00
Microscopio
Unid.
01
------
500.00
Calibrador
Unid
05
07.00
35.00


PRESUPUESTO TOTAL 11,893.20

CRONOGRAMA DE ACTIVIDADES

Tiempo de trabajo
AGOSTO
2008
SETIEMBRE
2008
OCTUBRE
2008
NOVIEMBRE
2008
Revisión bibliográfico e informes previos e
inicio de análisis de materiales






Análisis de materiales





Análisis de materiales y dibujo de las mismas






procesamiento de datos y elaboración de informe final.





























BIBLIOGRAFÍA

BATE, Luís Felipe
1979 Material Lítico; Metodología de clasificación, en noticiero mensual Museo Nacional de Historia Natural.,
Ano XVI. Nº 181-182-Santiago – Chile.

CARDICH, Augusto
1988 “Civilización Andina: su formación” CONCYTEC, Primera Edición
Camilo Carrillo 114.

GONZÁLES, Enrique, Posi Ezcot, MURIEL Posi. Escot y Cirilo Vivanco
1987 Los Chankas: Cultura Material. Laboratorio de Arqueología

GONZALES CARRE, Enrique:
1992 historia prehispánica de ayacucho UNSCH- Ayacucho, Primera Edición.

LUMBRERAS, Luís Guillermo.
1981 “Arqueología de la América Andina” Editorial Milla Batres S.A.
Primera Edición Lima – Perú

LUMBRERAS, Luís Guillermo.
1983 “Los Orígenes de la Civilización en el Perú”, Editorial Milla Batres S. A. Lima – Perú

LAVALLE, Danielle
1969 Industrias líticas del periodo Huaraz, procedentes de Chavin – Lima. Revista del Museo Nacional. Tomo XXXVI.

MANCUSO, HUGO. R
1999 Métodos de la Investigación en ciencia social Buenos Aires – Argentina Edit, Paidos

RICK, Jhon
1983 “Cronología, clima y subsistencia en el Precerámico Peruano, primera edición, Graph Editores S. A Lima – Perú.

RAVINES, Roger.
1972 “Secuencia y cambios en los artefactos líticos del Sur del Perú”.
Revista del Museo Nacional XXXVIII, Lima, Perú.






























ANEXO






FICHA PARA CLASIFICACIÓN DE ARTEFACTOS LÍTICOS

PROYECTO:…………………………………………………………………………….
PROCEDENCIA: ……………………………..CÓDIGO LÍTICO:……………………
REGISTRO:…………………….CÓDIGO PROYECTO:…………………………….
REGISTRO LABORATOTIO O MUSEO:…………………………………………….
ARTEFACTO: …………………………………………………………………………..
ACCIÓN:…………………….…..SINÓNIMO:…………………………………………
FORMA:………………………..VARIANTE:………………………………………….
SUBVARIANTE:…………………..GRUPO:………………………………………….
RASGO:…………………………………….FUNCIÓN:……………………………….
DESTINO:……………………………ESTADO:……………………………………….
DIMENSIONES
LARGO:……………………ANCHO………………….GROSOR:……………………
MATERIAPRIMA:…………………………….PESO………………………………….
PERIODO:………………………………………FASE:………………………………..
AÑOS:……………………………..ROLLO No:……………………………................
FOTOGRAFÍA No. ………………………..DIBUJO No…………………..................
OBSERVACIONES:...............................................................................................
...............................................................................................................................
CLASIFICADO POR:…………………………………………………………………...
FECHA DE CLASIFICACIÓN:…………………………………………………………
FOTOGRAFÍA DIAPOSITIVA DIBUJO:………………………………………………
UBICACIÓN DE LA MUESTRA:………………………………………………………
Nº DE DIBUJO:…………………………………………………………………………

POR ARMANDO GÓMEZ VALENCIA